

Una historia que pedalea desde hace más de 70 años
Más allá de una tienda...
La creatividad y el esfuerzo de Rafael no solo dieron forma a productos, sino que fundaron una manera distinta de vivir y sentir el ciclismo, un legado que perdura en cada Black.
Lo que hoy conoces como Black comenzó hace más de 70 años con la pasión de un corredor: Rafael Godínez Ávalos. Su amor por las dos ruedas, forjado en la pista y en carretera, lo llevó incluso a competir en Europa, y fue esa misma pasión la que decidió compartir con todos al fundar su pequeño taller, "Ciclo de México".
Con el tiempo, aquel taller se transformó en un referente del ciclismo. Hace más de 40 años, abrimos las puertas de nuestra primera tienda en la ciudad de Nogales, Veracruz, bajo el nombre de “La casa del ciclista”, sentando las bases de lo que sería una leyenda. De este periodo de ingenio y cercanía con la comunidad nacieron piezas innovadoras, como los icónicos asientos de las bicicletas “vagabundo”, que se volvieron un símbolo en la infancia de miles de niños en México.

La pasión que se hereda
La historia no terminó ahí. Con la segunda y tercera generación de la familia, el ciclismo dejó de ser solo una pasión personal para convertirse en un proyecto de vida compartido.
Las competencias, los entrenamientos y las vivencias sobre la bicicleta formaron parte de cada etapa, hasta consolidar lo que hoy conocemos como Black: un centro de bicicletas donde convergen tradición e innovación.

Black hoy en día
Con el paso del tiempo, Black se consolidó como mucho más que una tienda. Hoy somos un taller certificado Shimano/FOX, contamos con sucursales en Orizaba, Córdoba y Boca del Río, y seguimos construyendo comunidad con cada ciclista que se acerca a nosotros.
Nuestras rodadas han reunido a decenas de entusiastas, creando recuerdos, amistades y kilómetros compartidos. Pero nuestro mayor logro no es vender bicicletas, sino forjar una hermandad sobre dos ruedas. No tenemos clientes, tenemos compañeros de viaje para toda la vida.